¿No estás conforme con el aspecto de tus cejas? Desde hace un tiempo es posible rediseñar la forma, el color y la simetría de tus cejas de manera semipermanente. El microblading se ha convertido en una de las técnicas de belleza más socorridas para cambiar de imagen de la noche a la mañana entre las celebrities. Si tienes unas cejas demasiado finas, tienes algunas calvas o estás harta de maquillarlas y peinarlas continuamente, el microblading puede ser la opción perfecta para ti. La cantante Rosa López no lo ha dudado ni un momento y se ha sometido a esta técnica rápida, económica y que puede llegar a rejuvenecer mucho el rostro.
Con la edad la abundancia y el grosor de los pelitos de las cejas puede llegar a afectar a nuestra imagen. Las cejas despobladas y sin grosor pueden dar un aspecto envejecido a nuestra mirada. Enmarcar los ojos y mejorar la forma con un microblading es mejor que cualquier contorno de ojos para rejuvenecer nuestros ojos. Eso sí, hay que encontrar un centro adecuado para ponerse en manos de especialistas.
El cambio de imagen de Rosa López tras someterse a un microblading de cejas
Rosa López ha querido mejorar el grosor y la forma de sus cejas de una manera sutil y natural. Sus cejas eran muy finas y despobladas así que crearon un diseño para armonizarlas. La cantante ha admitido que ha cumplido un pequeño sueño al verse con unas cejas gruesas y simétricas. Además, aseguraba que le preocupaba bastante mantener su imagen por su profesión.
A diferencia de un tatuaje, el microblading hace pequeños cortes en la capa más externa de la piel, es por ello que el tratamiento no es definitivo. Sobre estos cortes, se aplica un tinte que absorbe la piel y que imita la apariencia de este vello facial. En un primer momento, el color se ve más intenso, pero con el paso de los días, tras la cicatrización, el color se va perdiendo.
¿Cuánto dura el microblading de cejas? Normalmente dura entre uno y dos años, por lo que, pasado este tiempo, sería ideal que retocasen el diseño para mantener el acabado deseado.
El precio de este tratamiento suele oscilar entre 200 y 300 euros, pero es probable que los retoques posteriores tengan un precio menor. Seguro que muchas os estáis preguntando si duele mucho, pero no hay por qué preocuparse. Esta técnica es muy tolerable y, aunque puede variar entre una persona y otra, suele compararse el dolor con el que produce un quemadura solar. ¿Te atreves?