De las cejas al pelo, dos expertas analizan la evolución estética de Marta Ortega: “Domina perfectamente ese equilibrio entre tendencia y sobriedad”

En los últimos años, Marta Ortega ha protagonizado una metamorfosis silenciosa pero contundente que ha ido más allá del plano empresarial. Convertida ya en presidenta no ejecutiva de Inditex, su evolución estética ha sido tan estratégica como sutil, acompañando su ascenso dentro del imperio fundado por su padre, Amancio Ortega.

Su transformación no responde a una moda pasajera ni a un cambio radical, sino a una refinada construcción de imagen que habla de poder, discreción y sofisticación. El estilo de Marta se ha ido puliendo al ritmo de sus responsabilidades, consolidándose como un espejo del lujo silencioso que representa el nuevo Zara.

Y es que, en el universo de la moda, donde la imagen personal es también un lenguaje, Marta ha sabido utilizar los códigos visuales para reforzar su identidad como líder. Hoy, cada aparición pública es una lección de estilo sin estridencias, en la que la naturalidad convive con la estrategia. Desde sus cejas hasta su melena, pasando por sus elecciones de vestuario y maquillaje, todo responde a una narrativa visual que refuerza su posición como una de las figuras más influyentes del sector.

“Desde el punto de vista de imagen y estilo, Marta Ortega ha sabido construir una estética coherente con su papel como presidenta de Inditex. Su evolución ha sido sutil pero significativa: ha pasado de un estilo más casual y relajado a una imagen más pulida y consciente, sin perder autenticidad. Lo interesante es cómo proyecta poder y sofisticación desde la discreción, no desde el exceso. En Moncho Moreno decimos que la elegancia verdadera es la que no grita, y Marta es el mejor ejemplo”, explica Berta Martín, CEO y co-funder de Moncho Moreno.

El poder de unas cejas bien definidas: naturalidad controlada

Una de las transformaciones más llamativas en la imagen de Marta Ortega ha sido la evolución de sus cejas. Si al principio lucía unas cejas más finas y ligeramente despobladas, hoy opta por una forma más densa, estructurada y perfectamente definida, que enmarca su rostro y potencia su expresión. Esta elección no solo sigue la tendencia actual de cejas naturales pero pulidas, sino que también proyecta una imagen de seguridad, control y carácter.

El diseño de sus cejas mantiene una armonía con el resto de su rostro, sin ser excesivamente marcado, logrando así una estética serena pero firme. No hay trazos artificiales ni contrastes bruscos: todo se integra con la misma delicadeza con la que ha construido su figura pública. “Las cejas de Marta Ortega son un elemento clave de su armonía facial. No son ni excesivamente gruesas ni demasiado depiladas, y eso genera un equilibrio perfecto con su mirada y sus facciones suaves. Son el marco de su mirada serena y decidida”, afirma la experta.

Una melena estudiada: mechas cálidas y peinados estratégicos

El cabello de Marta Ortega también ha sido protagonista de su evolución. De su rubio natural con matices oscuros ha pasado a unas mechas cálidas y perfectamente difuminadas que aportan luz al rostro sin perder naturalidad. Este tipo de coloración, muy trabajada pero visualmente sutil, es uno de los sellos de las mujeres poderosas que apuestan por la elegancia sin artificios.

Además del color, los peinados de Marta también han evolucionado hacia una mayor sofisticación. Recogidos pulidos, ondas suaves o coletas bajas con raya al medio son sus opciones más habituales, perfectamente alineadas con su estética. Estos peinados no buscan protagonismo, sino que se integran en el conjunto con elegancia.

“Sus elecciones capilares son absolutamente estratégicas. El rubio natural con técnicas como balayage o babylights refleja juventud y cercanía, mientras que los cortes como el bob o la melena midi estructurada hablan de practicidad y control. Sus decisiones proyectan a una mujer activa, contemporánea y elegante sin esfuerzo”, comenta Berta.

“Desde Moncho Moreno siempre insistimos en que el cabello debe adaptarse a la vida que llevas, no al revés. En el caso de Marta, su peinado le permite estar impecable en una reunión de negocio, un desfile o un acto institucional, sin parecer que ha invertido horas frente al espejo. Esa versatilidad también comunica eficiencia y visión global, muy en línea con su papel al frente de Inditex”, añade.

Maquillaje minimalista: el arte de la discreción bien calculada

Tal y como nos explica la CEO y co-funder de Moncho Moreno: “Marta Ortega es la reina del "menos es más". Su maquillaje ha evolucionado hacia una versión aún más depurada del estilo “make up no make up”. Opta por piel luminosa, mejillas apenas sonrosadas, labios naturales y un toque mínimo en los ojos. Este tipo de look transmite confianza, frescura y una sofisticación casi silenciosa. Un buen maquillaje no debe esconder, sino potenciar lo mejor de ti sin alterar tu esencia”.

El resultado es una apariencia cuidada, pulida, pero cercana, que encaja perfectamente con la narrativa de una mujer que ha asumido el control sin necesidad de alzar la voz. En un mundo donde muchas figuras públicas apuestan por transformaciones llamativas, su apuesta por lo esencial es, en sí misma, una declaración de poder.

Moda y liderazgo: cuando el estilo también comunica

“Diría que el estilo actual de Marta Ortega es sobrio, elegante y muy cuidado, pero sin caer en lo recargado. Creo que ha ganado seguridad con el tiempo y eso también se refleja en cómo se viste: ahora se le ve más sofisticada, más pulida, pero siempre fiel a un estilo natural y relajado. Antes era más discreta, incluso algo tímida en sus elecciones, pero ahora domina perfectamente ese equilibrio entre tendencia y sobriedad”, confirma la estilista Piluka de Echegaray.

Su armario está lleno de básicos elevados, cortes impecables, tejidos de calidad y siluetas relajadas que nunca pasan de moda. Es habitual verla con prendas de Zara combinadas con piezas de alta gama, creando looks que respiran equilibrio y buen gusto. “Posee un estilo propio muy definido —minimalista, elegante, sin estridencias— pero también es evidente que lo alinea con los valores de Inditex: accesible, moderno, real. No parece estar disfrazada de presidenta, sino que ha logrado hacer del cargo una extensión natural de su forma de vestir”, continua Piluka.

Este enfoque ha sido clave para consolidar su imagen pública como una directiva moderna, con los pies en la tierra pero con visión global. Su estilo no es aspiracional en el sentido clásico, sino inspirador por su autenticidad. Representa a una nueva generación de mujeres en el poder que saben que la moda no solo adorna, sino que comunica.

“La estética tiene un papel fundamental en el liderazgo, porque tu imagen todo lo comunica. Pero lo interesante de Marta es que sabe usar su imagen para transmitir valores más allá del estilo: coherencia, solidez, modernidad. Su estética no es para deslumbrar, sino para representar una forma de liderazgo actual, sin artificios. Y en ese sentido, es casi un manifiesto visual. Da la sensación de que cada decisión estética está muy pensada, aunque parezca casual”, sentencia la experta en moda.