Los expertos no se cansan de repetirlo: cada tipo de pelo tiene unas necesidades diferentes y debemos tratarlo en base a esas diferencias. El Pelo rizado es uno de los más envidiados por su gracia natural, pero quienes tienen el cabello de este tipo no siempre aciertan con los cuidados que necesita para sacarle el mayor partido.

Lavar el cabello correctamente

Para cuidarlo hay que tener en cuenta qué problemas le suelen afectar más que a otros tipos de cabello y cómo saber cuándo necesita que le echemos una mano. Y para empezar con buena mano hay que hacerlo desde el lavado porque es probable que estemos haciendo alguna cosa mal.

Parece una cosa simple y es un gesto que llevamos haciendo toda la vida, pero a veces no nos lavamos de manera correcta el cabello. Para hacerlo hay que aplicar el champú en la mano y hacer espuma o bien sobre el pelo, pero nunca sobre la raíz directamente. Eso puede alterar la producción sebácea del cuero cabelludo provocando la aparición de problemas como la grasa o la caspa.

Usar los productos adecuados

Tras el champú hay que escuchar a las necesidades de hidratación del cabello. El problema de la falta de hidratación es algo que afecta a casi todos los tipos de cabello, pero en el rizado puede acusarse más por rotura a la hora de peinarse por pegar tirones. Para evitar esos tirones lo mejor que podemos hacer es utilizar, tanto en el champú como en el acondicionador, fórmulas con agentes que aporten ese extra de hidratación.

Del mismo modo, apostaremos por hidratar también aplicando una vez al mes una mascarilla de medios a puntas que hará que las fibras capilares se mantengan unidas y no se acaben rompiendo, debilitando el cabello y generando las llamadas puntas abiertas.

Desenredar el cabello de manera correcta

Desenredar un cabello rizado puede ser una tarea ardua y puede ser complicado. Por eso debemos tener cuidado con el cepillo que utilizamos. Lo mejor es apostar por cepillos y peines con las púas un poco separadas y desenredar con el cabello mojado y mejor si es con la mascarilla o el acondicionador sobre él. Eso hará que el cepillo resbale, haciendo que sea más fácil desenredar y que no rompamos los cabellos.

Ojo con el peinado

Otro punto en lo que tenemos que tener cuidado es con los productos de styling. Lo mejor es que apostemos por fórmulas pensadas para cabellos rizados y con un acabado hidratante. Y por supuesto, no podemos olvidarnos del antiencrespamiento. En esto pueden ayudarnos bastante geles y esprays pensados para mantener a raya esos pelos que siempre van por libre, dando un aspecto unificado e hidratado a la melena rizada.