Mejora la apariencia de la piel de naranja, disimula las imperfecciones del rostro, y nos aporta un plus de juventud y luminosidad. Ha llegado el momento de prolongar y potenciar nuestro bronceado. Para que dure bonito mucho tiempo, debes hidratar la piel a conciencia, pero hay más trucos que te ayudarán.
1- Exfolia con cuidado
Ahora que estás morena, hazlo más a menudo y de manera muy suave, ya que la piel está más frágil. Lo ideal es hacerlo dos veces por semana y con productos de base oleosa, ya que limpian y nutren la piel sin acabar con el bronceado. Además, esto también es clave para oxigenar los poros.
2- Nutre en profundidad
Incluye en tu rutina de belleza productos que nutran en profundidad para que no se pele tu piel. Además, te ayudarán a presumir de un bronceado más luminoso. Son fundamentales los aceites a base de aguacate, argán o manteca de karité. Tampoco pueden faltar en tu neceser productos con vitamina A, C, D y E, ya que son poderosos antioxidantes que, además, te ayudan a reparar las pequeñas lesiones que el ADN celular ha sufrido a causa del sol.
3- Confía en una bruma
Las brumas, con o sin perfume, están formuladas con micropigmentos que se rocían con facilidad y aportan luz al instante. Tampoco puedes olvidar que los grandes aliados de un largo dorado son los autobronceadores. Los de última generación en spray se aplican con facilidad y no dejan manchas.
4- Potencia desde el interior
Por último, puedes ayudarte de la nutricosmética solar, que aporta los oligoelementos que la piel necesita para elevar y mantener las defensas solares, incluso, existen ya cápsulas que tienen un suave efecto autobronceador. ¡Sigue bajando, te recomendamos algunos que debes probar!