En el año 2018 Ana Matamoros se sometió a su primera operación de reducción de pecho. Una intervención a la que deseaba someterse y cuyos detalles iba desvelando a cuentagotas a través de sus redes sociales, desde donde sus casi setecientos mil seguidores han sido testigos de su evolución. Sin embargo, lejos de estar contenta con el resultado, la joven volvió ha pasar por quirófano en mayor del 2020 para volver a mejorar su busto: "Cuando me operé, uno de los dos pechos no se me curó bien y me ha quedado una cicatriz muy fea. Además, se me han vuelto a caer un poco. No tiene sentido haber pasado por el quirófano y tener un resultado que no me gusta", dijo.
El objetivo de la influencer era conseguir el mismo efecto que su madre Makoke, quien también recurrió a la cirugía para presumir de un pecho perfecto: "Mi madre se operó, se puso prótesis y le quedó muy bien, así que me voy a operar para conseguir ese resultado".
Pues bien, dos años después; y ya totalmente recuperada, ha hecho balance y ha explicado a sus seguidores que (por fin) está encantada con el resultado. "La mayoría conocéis toda la odisea que ha sido para mi las operaciones de pecho. Pero después de tantos años estar en este punto es una plena satisfacción", ha confesado a través de sus stories.
Feliz con el resultado de su operación de pecho un año después
A pesar de todo, la influencer está contenta con el resultado y con el equipo médico elegido a la hora de tomar esta decisión tan importante. “Los quirófanos dan mucho respeto pero cuando hay detrás un equipo tan profesional y tan cercano, la experiencia es insuperable. En mi caso 'Cliniem', la clínica del reconocido doctor González Nicolás, a los que trato como amigos ya”.
Además del resultado, ha recomendado acudir siempre a las revisiones posteriores a la operación. "Siempre he querido un pecho fino, elegante y discreto y ahora lo tengo. Aunque, eso sí, hay que recalcar que es muy importante acudir siempre a revisión porque hay que chequear que todo esté bien y, además, el resultado se ve siempre pasado el tiempo.
La joven se ha hecho un hueco como influencer de moda
Se ha convertido en uno de los rostros de las redes sociales que más comentarios positivos recibe en lo que a físico se refiere, algo que se ha ganado a pulso. Sí, en tercera persona del singular, porque Ana esculpe su cuerpo en el gimnasio diariamente desde siempre. Es cierto que, de vez en cuando, se pone en manos de su clínica de confianza para potenciar su belleza, pero se trabaja su físico y se calza las zapatillas todos los días para hacer su sesión de deporte correspondiente.