Todas sabemos de cartucheras, flancos, abdomen, glúteos y muslos poblados de pequeños hoyuelos, de adipocitos rebeldes e hinchados que tanto afean la silueta. Los recursos para combatirla se cuentan por miles: desde cremas específicas, a masajes pasando por aparatología de vanguardia o el bisturí. Esta última opción es la única que elimina definitivamente la celulitis. Sin embargo, sino está perfectamente ejecutada, puede dejar secuelas (hendiduras e irregularidades), casi más antiestéticas que la propia celulitis). De ahí que sean muchas las que decidan realizarse un tratamiento en cabina para paliarla.
¿Funcionan los tratamientos en cabina para acabar con la celulitis?
Claro que sí, pero tiene que existir un buen diagnóstico, que determine el tipo de celulitis. Y analice el estilo de vida de quien la padece y exije compromiso y constancia en la realización de la sesiones. Lo mejor es optar por personalizar el tratamiento. La combinación de aparatología según vaya evolucionando es siempre la clave, y gracias a ello conseguimos resultados fantásticos. Eso sí, normalmente son necesarias alrededor de 20 sesiones y hay que acompañar el tratamiento. ¿Cómo? Con una dieta sana, algo de ejercicio y tisanas drenajes. Las últimas que hemos probado, las de LPG, cuyos resultados son magníficos y han roto stock en Francia.
¿Qué debes evitar para acabar con la celulitis?
- Cuando hagas la compra recuerda que son mejores los alimentos ricos en antioxidantes. Nos ayudan a combatir los radicales libres. El Té verde, además de ser antiinflamatorio, mejora la elasticidad.
- Tampoco olvides cítricos como los kiwis, y también pimientos, arándanos, tomates, brócoli y piña. La vitamina C es necesaria para que el cuerpo produzca colágeno y repare los tejidos. También el selenio que puedes encontrar en las nueces de Brasil y en los mariscos.
- Y, por supuesto, evita fritos y grasas vegetales que generan grasa en tu piel, celulitis y toxinas. Reduce al máximo los edulcorantes y el azúcar. Debilitan nuestro sistema inmunitario y provocan efectos negativos en el aspecto de nuestra piel.