La Reina Letizia prosigue la semana más viajera que se le recuerda en mucho tiempo. Empezó el lunes en Vigo, está hoy en San Millán de la Cogolla (La Rioja) y termina el viernes en Basilea (Suiza). Esta mañana la ha llevado al Monasterio de Yuso para clausurar el XV Seminario Internacional de Lengua y Periodismo, un tema que ella conoce bastante, como ya sabemos, debido a su antigua profesión. De igual forma, nosotros también conocemos su look para la ocasión, con el que además Letizia se mete de lleno y con paso firme en el otoño.
Chaqueta de pata de gallo, pantalones pitillos o leggings y tacón alto, un trío con el que la Reina se ha salido un poco del tradicional traje de chaqueta de aire ejecutivo, dándole un toque de modernidad. Porque resultón lo es y mucho. Y eso que es reciclado al completo.
Todo gracias fundamentalmente a esa americana que ya nos enamoró desde su estreno. Se la vimos por primera vez en noviembre de 2019, en el aeropuerto de Barajas, cuando se disponía a partir en Viaje de Estado hacia Cuba. En enero de 2020 volvió a ponérsela para una reunión con FEDER.
Es de Uterqüe, con ese llamativo estampado de pata de gallo XL y de línea cruzada con cuatro botones joya. Como mejor luce es así, cerrada, precisamente para dar empaque a la estructura. En su momento costaba 179 euros, pero se agotó pronto en la web de la marca.
La ha combinado de igual manera, con pantalones ajustados al tobillo, con un tejido un poco encerado, para hacer destacar más a la chaqueta. Y con unos salones de fino y alto tacón de Magrit, que le dan el toque más cañero y sexy al estilismo. En lugar del jersey de cuello alto que se puso en su estreno, Letizia ha acertado con un top básico negro de cuello a la caja.
Como viene siendo costumbre últimamente, Letizia ha prescindido de cartera o bolso. La verdad es que a veces, ¿para qué? Con las manos libres la Reina puede interactuar mucho más suelta. Hoy lo ha demostrado: ha hecho su entrada al lugar sin parar de hablar y moviendo expresivamente sus manos. En una de ellas brillaba su inseparable anillo dorado de Karen Hallam.
De pendientes ha recuperado los del diseño de 'daga' de Gold&Roses (1.800 euros), que a pesar de ser uno de sus favoritos de los últimos años, en estos meses los había aparcado un poco en el joyero. Con este conjunto van ideales, porque refuerzan esa idea de modernidad, de líneas sencillas, pero potentes.
Por último, su melena suelta con raya al medio y las canas bien a la vista.
en conclusión, La Reina Letizia se ha marcado un look en blanco y negro en todo su esplendor. Actual y abrigada lo justo, perfecta para el otoño.