Y van tres exposiciones seguidas para nuestros 'royals'... Emilia Pardo Bazán, Berlanga y hoy "Odaliscas. De Ingres a Picasso", lo cual ha llevado a los Reyes Felipe y Letizia hasta Granada, en cuyo Museo de Bellas Artes (Palacio de Carlos V) tiene lugar la muestra. Es decir, la Alhambra, el glorioso 'palacio rojo'. Rojo es el color fetiche de la Reina Letizia, pero esta vez ella no se dado por aludida ni se ha rendido al guiño. Así pues, ¿qué es lo que nos hemos encontrado?
¡Verde! Verde esperanza, verde primavera-verano, verde intenso... Y reciclaje. La Reina Letizia llevaba varios estrenos seguidos y hoy ha puesto el freno recuperando un vestido de bajo asimétrico de Maje. Los picos de la falda son justamente lo más destacable del modelo, lo que le da un punto original y atrevido.
Lo estrenó en Oviedo en julio de 2019 y desde entonces se lo ha vuelto a poner varias veces, entre ellas durante su gira del verano de 2020 (en concreto en las Islas Baleares). Cero sorpresa y nuestro gozo en un pozo.
Es un diseño muy favorecedor, con escote a pico, cintura de nido de abeja, manga larga, pero confeccionado en tela ligera (si no a ver quién aguanta con estos calores) y un bonito estampado vegetal. Quizás hubiera resultado más adecuada y lógica una manga corta, dado que Letizia ya ha sacado sus brazos al sol estos días, pero...
La clave está en cómo lo ha combinado esta vez. En Mallorca llevaba coleta y alpargatas de cuña. De momento no hay noticias del calzado que se convirtió en su imprescindible durante el verano pasado. No, hoy ha elegido unos salones destalonados en color nude de Carolina Herrera, junto a una cartera de mano en tono morado de Felipe Varela, de las de solera, de 2009. Verde y morado. Se trata de una combinación algo arriesgada, y que se justifica porque algunos ramitos del vestido van en ese tono.
Sin embargo, el gran acierto es otro: los pendientes de Tous. Letizia ha rebuscado en el joyero para sacar esta espectacular pieza de 2015, realizada en "oro de 18 quilates, crisoprasas y rubíes tratados", cuyo precio original fue de 1.865 euros. Es decir, que se trata de unos de los más caros entre sus tesoros. Su virtud es que regalan luminosidad al rostro con el color de sus piedras, rosa fuerte y verde. Después de muchos días de discreción a este respecto, con piezas que se fundían con el estilismo, se agradece que la Reina rescate estos pendientes más alegres. Y además volvemos a mencionar a Tous, la antes súper favorita de Letizia y desde hace un tiempo algo olvidada.
Pero no acabamos aquí. A este acto seguirá la entrega de los Premios Nacionales de Innovación y Diseño 2020, en el Palacio de Congresos de Granada. Solo una hora después de La Alhambra y sin tiempo, lógicamente, para cambios de vestuario. Un día intenso para los Reyes en la bella ciudad andaluza que se salda con una nota de notable alto para el look de Letizia. ¡Y mañana más!