La Reina Letizia hace su primera aparición en los Premios Princesa de Girona de estreno, pero de bajo perfil. ¿Es esto malo? No, necesariamente. Siempre decimos que es para no restar protagonismo a sus hijas, cuando coincide con ellas en actos públicos de este corte (estos galardones están enfocados al talento de los más jóvenes), pero lo cierto es que tampoco se iba a poner de fiesta. Le ha bastado con un coqueto vestidito vaquero que bien le serviría para bajar a la playa...
Es un diseño de líneas sencillas, con escote subido ligeramente en pico, sin mangas y de largo midi con línea trapecio. El tejido denim o vaquero ya nos da una idea de su ser 'casual', resaltado además con pespunteados en blanco. El talle se marca con un cinturón con tres grandes botones en el frente. De ser de rayas, podría tratarse perfectamente de un look 'marinero'. Como decimos, si por debajo llevara el biquini o el bañador, tampoco nos extrañaría.
El otro gran protagonista de este look son sus alpargatas de cuña. Este año ha tardado en empezar a sacar este tipo de calzado, pero una vez inaugurado el verano, la Reina Letizia ya no para de recurrir a su gran fetiche. Estas son de color crudo y se cierran con pulsera en el tobillo. Son de Toni Pons, una firma gerundense que luce por primera vez y es, evidentemente, un guiño de moda.
Por otro lado, hacemos hincapié en sus pendientes: los de estrellitas de diamantes de Gold&Roses. Desde que los estrenó hace un par de semanas, para su encuentro en Madrid con Rania de Jordania, ya los ha lucido en varias ocasiones. Van camino de convertirse en sus nuevos favoritos. Le costaron 1.565 euros, así que más le vale amortizarlos.
La Reina Letizia ha aparecido en clave informal y nada pretenciosa. Su melena suelta con raya al lado, un intenso bronceado (acentuado con cremita con 'brilli brilli'), sin bolso ni cartera, para ir ligera y fresquita. Esta tarde cambiará el tono para la ceremonia de entrega de los galardones, a buen seguro con más glamour.