Primer acto oficial de la semana para la Reina Letizia y sin salir de casa. Sí, mientras el Rey Felipe encara la recta final de su confinamiento por Covid (terminará el próximo miércoles), la consorte ha afrontado esta mañana dos audiencias en La Zarzuela. Eso, por lo pronto, ya nos priva de un elemento de estilo: el bolso o la cartera. Veníamos de una buena racha de Letizia, pero veamos...
En primer lugar, ha recibido a los máximos responsables de las principales televisiones públicas iberoamericanas; y posteriormente, a una representación del comité editorial del diario 65YMÁS. En esta última, por cierto, ha coincidido con Fernando Ónega, padre de su amiga y colega Sonsoles Ónega. Así que hoy tenía por delante una jornada de temática periodística, que es lo suyo y lo nuestro.
A priori, audiencias más Zarzuela no nos hacía albergar demasiadas esperanzas estilísticas. No por nada, sino porque en estos casos la Reina prefiere tirar más por lo seguro y cómodo, como algún conjunto de corte ejecutivo sin más. Pero, ¿qué ha hecho esta vez?
Rojo, todo rojo. O sea, que al menos descartamos el 'rollo working'. La Reina se ha vestido de arriba a abajo de su color fetiche, que da fuerza, empodera y favorece. Y es que el monocromatismo a ultranza es una de las tendencias del momento. No hace falta incluso que sea del tono exacto. Puedes apostar por un color y avanzar por la misma gama. El resultado es limpio, moderno y claro. Lo que todas queremos...
Además, en su caso ha sido un revival de un estilismo pasado. Vamos, un reciclaje. Lo estrenó en enero de 2019, junto con un abrigo de leopardo, y lo repitió en marzo del mismo año, también en La Zarzuela. Lo único diferente entonces fueron sus zapatos negros. Mucho mejor la elección de hoy.
Se compone de un top fino de punto con cuello caja de manga larga con botoncitos dorados en los puños y un pantalón culotte con cinturón incorporado. Ambos son de Hugo Boss. A los pies, unos salones de charol de Lodi.
Los pendientes de estrella de Chanel (tan lujosos como discretos) y el anillo dorado de Karen Hallam cierran el apartado de joyas.
La sencillez es la clave. No hay mucho más que ponerse con esto. Son piezas que encajan bien y llaman la atención por sí mismas sin exageraciones. No se puede negar que sea bonito y resultón. Nos gusta. Ahora bien... Más de lo mismo. Hoy, ni un estreno. ¿Acaso Letizia vuelve a entrar en modo ahorro? Ella suele jugar bien con los tiempos y conjuga prendas nuevas y antiguas normalmente con sabia mano.
La Reina no volverá al trabajo público hasta el próximo viernes, cuando se reúna con el Patronato de Huérfanos del Ejército de Tierra por su 150º aniversario. A ver por dónde tira...