¡Por fin ha llegado el momento! La alfombra azul, el sonido de las gaitas y la Familia Real al completo, acompañados por la Reina Sofía, para celebrar la entrega de los Premios Princesa de Asturias. Y también tenemos otro lookazo de la Reina Letizia, quien ha bajado del coche frente al teatro Campoamor de Oviedo derrochando glamour en blanco y negro.

Letizia deslumbrante, Letizia como una estrella de los años 50. El vestido es de Carolina Herrera, su firma de confianza para triunfar una vez 'desterrado' Felipe Varela.

La Reina Letizia revive a Audrey Hepburn en los Premios Princesa de Asturias
Foto: Robert Smith

El diseño tiene dos partes bien diferenciadas: la superior en blanco forma una capita con apliques de lentejuelas en diferentes tamaños y perlas que parecen flores; y la inferior va en negro, de corte recto con pinzas sencillas, con largo al tobillo y una abertura que permite el paso. Una silueta que recuerda mucho a la mejor Audrey Hepburn de Givenchy.

Por otro lado, sus pendientes. La Reina ha recuperado las espectaculares piezas de diamantes, creando una cascada floral, que le regaló el emir de Catar durante su última visita a España. Un guiño al inminente Mundial de Fútbol que tendrá lugar en aquel país. El moño, relajado y firme a la vez, permitía mostrarlos en esplendor.

Y llegamos a sus pies. Esos que sufren de incómodas dolencias. Y por eso se ha decidido por aparcar los altísimos taconazos por primera vez en esta gala. Su mejor opción: unas sandalias destalonadas negras con adorno de lazo de Isabel Abdo, que ya tenía y que con sus taconcitos de 5 centímetros ponían el acento final al look con una sofisticación sin esfuerzo. Lo dicho: una Audrey reinterpretada. 

La Reina Letizia revive a Audrey Hepburn en los Premios Princesa de Asturias
Foto: Robert Smith

Nota agridulce: este mismo vestido ya lo llevó la elegante Sassa de Osma hace unos meses en el Teatro Real de Madrid.

Doña Sofía llegaba este mediodía al hotel de la Reconquista. Y esta tarde ha reaparecido junto a los Reyes y sus hijas por primera vez desde el pasado verano en Mallorca. No ha faltado a su cita con estos premios, que apoya con ahínco desde sus inicios, ahora como abuela de la flamante y adolescente presidenta. Nota curiosa: ella y la otra abuela presente, Paloma Rocasolano, han coincidido en vestir de azul, el color del Principado.

Con esta gala, los actos por los Premios Princesa de Asturias van tocando a su fin. Mañana la Familia Real pondrá la guinda a esta edición nombrando a Cadavéu como Pueblo Ejemplar 2022. Pero esa ya será una ocasión mucho más relajada, en tono cercano, donde escucharemos de nuevo a Leonor entre los paisanos. Y veremos a Letizia más casual, pero siempre orgullosa.