Poco se imaginaba Kiko que, tras darse a conocer con la banda musical andaluza Los caños, le llegaría el verdadero éxito al lado de su hermana pequeña, Shara. Ambos formaron Kiko y Shara, un dúo musical que colapsó durante años las listas musicales quedándose para siempre en el imaginario popular. Decidieron separarse en 2010 para regresar en 2015, pero ya nada volvió a ser lo mismo. Los hermanos andaluces, que han vivido en sus propias carnes lo más duro de la industria, nos abren las puertas de la casa de sus padres en Cádiz, el lugar dónde comenzó todo, para contarnos qué ha sido de ellos durante todos estos años.
¿A dónde nos habéis traído?
Kiko: A nuestro hogar. Aquí hemos vivido desde niños. Es el lugar donde están todos nuestros recuerdos, junto a nuestros padres. ¿Volvéis a sentiros niños cuando volvéis a esta casa?
Shara: En parte sí, porque nuestra madre nos cuida de la misma manera (se ríe), pero ahora es distinto porque tenemos hijos pequeños con los que disfrutamos y nos divertimos en familia.
Vemos muchos recuerdos de vuestros inicios.
K: Nuestra casa es nuestro museo de tantos años de música (se ríe). Nuestra madre guarda como oro en paño todo lo que ha podido recopilar (revistas, premios, fotos…) es parte de nuestro reconocimiento y vivencias y toda la familia es consciente del esfuerzo y trabajo que hay detrás y lo especial que es cada paso que hemos dado.
¿Cómo vivieron vuestros padres ese fenómeno?
S: Al principio creo que nos vino un poco grande a todos, por lo que conlleva introducirse en un mundo totalmente nuevo, pero poco a poco todo fue poniéndose en su lugar y puedo decir que, dicho por ellos, se sienten muy orgullosos de nuestro camino. Son conscientes de lo que hemo sufrido y luchado.
Atrás han quedado aquellos dos adolescentes que encandilaron todo España y ahora sois dos adultos que continuáis con la misma gana y magia que en los inicios ¿Cómo ha cambiado vuestras vidas?
K: Ahora soy padre, tengo una familia y la responsabilidad en ese sentido ha cambiado mucho.
S: Ahora somos padres con responsabilidades, entendemos mejor de qué trata la vida, y sabemos valorar más y mejor todo lo que nos rodea. Mi trabajo y mi día a día es entorno a mis hijos, mi familia. Todo lo hago por y para ellos.
Estamos aquí porque habéis sacado nueva canción TBT, que se estrenó en Cadena Dial ¿Qué me podéis con tarde este nuevo trabajo?
K: Es una canción muy Kiko& Shara, con un estribillo muy pegadizo y una producción ochentera que le va a gustar a todo el mundo. Seguimos sonando a nosotros, es un detalle que intentamos mantener y cuidar mucho.
¿Cómo fue ese momento de sentaros y llevar adelante esta vuelta?
K: Fue fácil, nos echábamos de menos, como hermanos tenemos una química que con solo una mirada sabíamos que era el momento de volver.
S: Siempre nos solicitaban, aunque el dúo no existiera en ese momento, tanto los medios como los fans… fue fácil y surgió de manera natural. Volvimos en 2015 ante miles de personas en un concierto muy especial en Cádiz. Aunque el camino no fue fácil.
Habéis pasado una etapa bastante complicada. Hablamos de que habéis tocado el cielo, pero también lo más profundo.
S: Cuando hablamos de tocar el cielo es referido a cuando todo va bien y todo el que te rodea te pone la alfombra roja allá por donde pisas. Cuando en algún momento algo falla, te cierran ciertas hay personas que te dan la espalda porque ya no le eres rentable. Hemos pasado por todo tipo de situaciones, hemos conocido personas maravillosas y personas para olvidar, nos han abierto puertas y nos han cerrado otras. Pero a pesar de todo yo me lo tomo todo como algo positivo, porque así es como se aprende y porque eso nos ha hecho más fuertes para creer más aún en nosotros mismos y saber quién sí y quien no.
¿Qué es lo que más os ha dolido?
K: No existe la carrera musical perfecta. Lo que más nos duele es ver que a veces han intentado hacernos ver que teníamos mucho por hacer, pero se equivocan y estamos muy vivos. La industria no decide por nosotros.
S: Encontrarnos con personas que hacen de todo menos mirar por el artista, hasta el punto de llevarse lo que no les pertenece.
¿El primer parón en 2010, por qué se produjo?
K: Necesitamos parar, llevábamos una carrera de muchos años. A mí se me juntó los años con Los Caños y Kiko y Shara…
S: Llevábamos una vida demasiado intensa en todos los aspectos. Necesitábamos parar para reflexionar sobre quiénes somos, hacia dónde queremos ir y por qué. Nos pilló justo entre la adolescencia y la edad adulta, y ordenar las piezas del puzzle a veces es imprescindible.
¿Esperabais que vuestra vuelta fuera así?
K: La vuelta no ha sido fácil porque sentíamos que después de cinco años había que empezar más o menos de cero…
S: Tener una trayectoria importante a tus espaldas a veces no es suficiente. Eso en otros países no sucede, cuando un artista tiene un reconocimiento es para toda la vida.
¿Ha afectado esto a vuestra relación de hermanos?
K: Hemos tenidos nuestros momentos, como todos los hermanos, pero ahora estamos más unidos que nunca. Los años y las vivencias han hecho que seamos una piña
¿Miráis al pasado con alguna nostalgia?
K: Sí, un poco, pero sobre todo con orgullo de ver todo lo que hemos conseguido.
S: A veces sí, por todo lo que hemos vivido, por cómo se consumía y se comercializaba la música antes. Y porque quizás en algunos momentos, y ahora viéndolo desde otra perspectiva, habríamos cambiado algunas cosas.
¿Cómo está viviendo vuestro entorno esta vuelta?
K: Super felices por nosotros porque saben lo que significa para nosotros, son nuestro motor
S: Ellos han sufrido junto a nosotros los peores momentos y ahora que todo empieza a ir mejor, lo disfrutan de la misma manera. Lo que nos transmiten es que están orgullosos.
¿Cómo veis lo de participar en un reality?
K: Depende de cómo fuera y que nos aportara …
S: Muy difícil (se ríe).