Javier Ungría, el empresario conocido por sus recientes confrontaciones con su ex, Elena Tablada, ha decidido apartarse de la tormenta judicial y centrarse en su papel como padre. Recientemente, ha viajado a Ibiza donde se le ha podido ver disfrutando de las aguas pitiusas, navegando en un yate en alta mar con su hija y amigos.
Uno de los momentos del viaje fue cuando Javier y su hija Camila, junto con tres amigos de la pequeña, subieron a una tabla de surf pala. Capitaneados por Javier, quien manejaba el remo, los niños disfrutaron de un emocionante paseo por el mar cerca del yate donde navegaban. Las imágenes capturan la emoción y la alegría en los rostros de los niños mientras su padre los llevaba en una aventura marítima. Después del paseo, Javier se encargó de duchar a la pequeña a bordo de la embarcación, mostrando su dedicación y cuidado hacia su hija.
Más tarde, se pudo ver a Javier portando una equipación de talla pequeña del Real Madrid, probablemente destinada a su hija Camila, coincidiendo con el primer partido de liga del equipo merengue. Después, Javier y su hija estuvieron en el puerto marítimo acompañados por una amiga de su hija y su madre, quien hablaba de forma animada con Javier.
Estos momentos que Javier comparte con su hija representan una pequeña tregua que el empresario mantiene con su ex y madre de la pequeña, Elena Tablada. Recientemente, hemos sabido que la diseñadora de moda contrató a un detective privado para que siguiera los pasos de su marido. Ella el motivo lo tenía claro. Pensaba que Javier le había sido infiel mientras estaban juntos. Tras la polémica generada, Elena no tardó en desmentirlo y a través de la periodista Almudena Pozo explicaba que había detrás de todo esto.
Elena Tablada y Javier Ungría decidieron separarse el verano pasado y lo que parecía, en un principio, una ruptura elegante y amistosa, ha dado un giro de guion, durante estos últimos meses, y ha aflorado una guerra entre ellos que todavía no ha escrito el capítulo final. Y todo viene por el tema de la custodia de Camila, la hija que tienen en común. La tensión llegó a tal punto, que Elena aprovechó sus redes sociales para decir: "Por fin, después de tanta incertidumbre e inconvenientes innecesarios, las tengo juntitas (...) Qué caro se paga no elegir bien a una persona". Ahora está menos activa en su Instagram, prueba de ello es que el último post que tiene público data del 4 de julio, cuando fue invitada a la fiesta de cumpleaños de 'El Turronero'.