Cuando le han preguntado, Eugenia Martínez de Irujo no tenía ni idea, pero todos los que presenciaron la escena aseguran que fue un milagro. Cayetano Rivera se jugó la vida para salvar a su compañero Roca Rey después de ser acorralado contra los tableros por un toro. Sucedió durante una de las corridas del pasado martes en la Plaza de Toros de Santander. El excuñado de Eugenia se echó encima del toro, literalmente, para poder sacar de ahí al joven peruano, pero sin poder evitar que el toro también le corneara. Ambos han podido contar esta dura faena que casi termina en tragedia. Aunque se lleva muy bien con el hermano de su exmarido, la aristócrata se enteraba de la noticia por boca del reportero. Totalmente desencajada, no ha dudado en agradecer por ponerle al día. Su cara es un auténtico poema.