El pasado viernes, 3 de noviembre, Cándido Conde-Pumpido Varela, hijo del presidente del Tribunal Constitucional y expareja de Lara Dibildos, era detenido por una presunta agresión sexual grupal en su chalé de San Blas, en Madrid. Tras a pasar a disposición judicial, el abogado y sus dos amigos, también arrestados, han quedado en libertad sin medidas cautelares. En el auto del juzgado de Instrucción número 44 de Madrid se especifica que las imágenes de las cámaras de seguridad de la vivienda del abogado "desvirtúan la versión dada por la víctima".
El auto de la jueza, publicado por 'El Mundo, señala que las imágenes aportadas por Cándido Conde-Pumpido, obtenidas por las cámaras de seguridad de su domicilio, "desvirtúan la versión dada por la víctima" de la presunta agresión sexual. Se especifica además que en estas pruebas presentadas "se ven distintas dependencias de la casa a lo largo de toda la madrugada del pasado viernes. Y en las mismas no aparecen en ningún momento los denunciados, ni se visualiza tampoco ninguna situación similar a la descrita por la denunciante". También se señala que la presunta víctima, una prostituta brasileña, aparece en distintas dependencias de la vivienda en compañía de la expareja de Lara Dibildos en algunas ocasiones y en otras sola.
"Puede observarse a la denunciante y al denunciado en uno de los dos dormitorios durante varias horas, entrando y saliendo, bebiendo, etc, sin que pueda adivinarse ninguna situación coincidente con el relato de los hechos por ella mantenido", se dice. Después de esto, la jueza ha estimado que no deben tomarse las medidas que ha solicitado la Fiscalía, quienes pedían una orden de alejamiento sobre la presunta víctima. "En consecuencia, no se estima que concurran los requisitos exigidos para la adopción de una medida restrictiva", concluye el auto.
Según apunta el diario anteriormente mencionado, Cándido Conde-Pumpido ha señalado que las acusaciones sobre su persona son "inventadas y que tiene pruebas para demostrarlo". Además, el abogado hace hincapié en que va a demandar a la prostituta brasileña por denuncia falsa. También ha señalado que la presunta víctima se negó a irse de la casa y que en las grabaciones de las cámaras de su chalé "se puede ver como miente, se resiste a marcharse, golpea la puerta de su domicilio y les llega a amenazar. La defensa de la expareja de Lara Dibildos y sus dos amigos apunta que "la denuncia no tiene la más mínima credibilidad".
El relato de los hechos ocurridos en el chalé de Cándido Conde-Pumpido
Según publicaba 'El Debate', los presuntos hechos tuvieron lugar en el chalé de Cándido Conde-Pumpido. La joven brasileña llegó a la vivienda después de que fueran contratados sus servicios y fue allí donde fue presuntamente abusada sexualmente. Ella misma manifestó en todo momento que las relaciones no eran consentidas. A la salida de la casa, la presunta víctima llamó al 091, fue llevada al Hospital La Paz de Madrid y allí se activó el protocolo de agresión sexual. El caso está siendo investigado por los agente de la UFAM de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.