Excelentes noticias para Alice Campello y Álvaro Morata. A pesar de que saltaron las alarmas este martes cuando el futbolista desveló que su mujer estaba en la UCI tras varias complicaciones en el parto, la modelo se encuentra recuperándose. Prueba de ello, que haya abandonado la UCI de la Clínica de Navarra, donde todavía están ella y su hija recién nacida, Bella. Así lo ha revelado su marido, quien explica que está mejor y quien además ha dedicado unas preciosas palabras a su esposa días después de uno de los mayores sustos de su vida. "Todavía estoy asimilando todo lo que ha pasado. Gracias, Alice por darme una vez más una lección. Eres, sin duda, una luchadora y un ejemplo para mí. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida y mi vida sin ti no tendría ningún sentido", ha dicho Morata junto una foto en la que madre e hija se funden en un abrazo.
El deportista desvela que Alice ya está en la habitación del hospital, donde ella y su pequeña descansan. Con un rostro visiblemente cansado, sin apenas poder abrir los ojos debido al cansancio y con todavía una vía en su brazo, la maniquí no puede sentirse más afortunada de que la historia haya tenido un final feliz. Apenas puede moverse todavía y los médicos le han recomendado no hacer esfuerzos, por lo que está viviendo sus primeros días como madre por cuarta vez desde la cama y con la ayuda de su pareja. Con unas ganas inmensas de volver a casa con sus pequeños, Alice también es consciente de lo importante que es salir de la clínica al 100 %.
Tanto ella como Morata se asustaron mucho cuando después del nacimiento de Bella Alice empezó a sentirse mal: "La mamá, desafortunadamente y después de que el parto haya ido muy bien, tuvo complicaciones que nos han asustado mucho. Ahora mismo está en la UCI, pero poco a poco se está recuperando bien. Solo un día después de esta confesión, el también empresario ha revelado que su esposa ha mejorado lo suficiente para ya estar en planta. Su bebé está a la perfección y esto tan solo les lleva a pensar en lo importante que es "disfrutar cada momento", pues a veces la vida da giros inesperados como este.
En la fotografía que ha compartido Álvaro Morata aparece su hija recostada sobre el pecho de su madre, bebé que, por cierto, es una auténtica preciosidad. Con un gorrito negro y un pijama con dibujos infantiles, la bebé refleja en su gesto auténtica paz. Por el momento, disfrutan de su nueva compañía teniéndole cerca en una cuna hospitalaria en la que ya han posado un peluche color blanco que parece encantarle. La familia de ambos ahora tan solo celebra que madre e hija estén mejor y que Alice haya vuelto a demostrar una fortaleza imparable.